Recomendaciones para la conservación y consumo del jamón

Como mantener las propiedades nutricionales del jamón hasta el momento de su consumo.
De todos es sabido que cuando empezamos un jamón o un lomo, ya sea ibérico o no, lo que nos gustaría es que todos esos sabores y olores, que se desprenden en el momento del primer corte, estuvieran presente a lo largo de su consumo. Entonces, la pregunta es: ¿Cómo conseguir una conservación adecuada de los productos ibéricos? Obviamente, la importancia de la conservación hace que las propiedades nutricionales extraordinarias que presentan los productos ibéricos se mantengan a lo largo de su tiempo de consumo.

Con carácter general, los productos curados ibéricos de humedad intermedia no precisan de refrigeración durante su etapa de almacenamiento. Pero jamones y embutidos curados, envasados al vacío, se pueden conservar más tiempo en buen estado guardándolos en lugar fresco y seco, alejados de la luz del sol.

Una vez empezado el jamón, las recomendaciones anteriores se mantiene y, además, tras cada uso del mismo, es recomendable recubrir con la misma grasa de la pieza todas las partes abiertas al corte y tapar con un trapo de cocina hasta su próximo uso. Para los sobres al vacío, su conservación en el frigorífico hasta su consumo es la mejor opción.

La pieza entera se recomienda el consumo en un plazo no superior a un mes para que no pierda sus excelentes cualidades. Si está envasado en sobres al vacío, y aunque posea una fecha de consumo preferente, lo ideal es igualmente consumirlo lo antes posible, no dejando transcurrir más de 8 horas una vez abierto. Dejar atemperar, abrir el vacío y tras unos minutos proceder a emplatar y consumir.

Para los embutidos, que suelen servirse al vacío, es una buena práctica orearlos a temperatura ambiente un par de horas, para que se le adquiera el punto óptimo de consumo. Una vez abierto, consumir lo antes posible, sin volver a recubriros con una capa de plástico o similar. Aquí la piel embutida protege al durante su periodo de consumo.

Nutricionalmente, en 100g de producto, los valores aproximados son:

Jamón ibérico de bellota Valor energético (calorías): 304 Kcal / 1267 KJ
Proteínas: 33 g.
Hidratos de carbono: 1 g.
Grasas totales: 23 g. (de las cuales, saturadas 8,5 g.)
Sal: 4,5 g.
Azúcares: <0,5 g. (libres de gluten y lactosa)
Lomo ibérico de bellota Valor energético (calorías): 316 Kcal / 1321 KJ
Proteínas: 36,5 g.
Hidratos de carbono: 1 g.
Grasas totales: 17 g. (de las cuales, saturadas 6,5 g.)
Sal: 3 g.
Azúcares: <0,5 g. (libres de gluten y lactosa)
Valores por 100 gramos de producto

Conclusión
Con estas recomendaciones, Don Finardo quiere ofrecer a sus clientes y amigos la mejor experiencia como fanáticos de producto ibérico de bellota que somos.

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